viernes, 24 de agosto de 2007

1, 2, 3, etc....

Me gustan tus manos cuando se entrelazan, me gustan tus ojos entornados como con vergüenza de vaya a saber uno qué recuerdo, me gusta tu pelo oscuro y tus cejas anchas, tu diente encimado, tu pecho de potencial nadador, tu canción con ojos cerrados, tus pies, tu mirada para adentro al pensar algunas frases, tu calmado abrazo, el lunar de tu oreja, el surco de tu mejilla, tus dudas y tus certezas, cierta laxitud al sentarte, como displicente y lejano, tu nariz recta, tus pestañas tremendas, tus ronquidos, tus sudores nocturnos, tus balbuceos entre sueño y sueño, tus entusiasmos súbitos, tus labios fruncidos y corridos a un costado cuando se trata de elegir algo, tus uñas cortas, la parte superior de tu espalda, tus besos al aire. Me gustan muchas cosas tuyas, adoro otras, las llevo conmigo y me sorprenden cuando las reencuentro, son siempre mejor de lo que las recuerdo. Como los jazmines, que huelen cada vez nuevo y mejor. P.D.: No incluyo en la lista ciertas obscenidades.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

me gustaria saber mas

antiprímula dijo...

anónimo: ¿más de qué? ¿de quién? ¿de ella? ¿de él? ¿de lo que a ella le gustaba de él? ¿de lo que a él le gustó de ella? ¿de lo que son ahora pasado septiembre y la primavera, pasado octubre y su 17? Si me especifica un poco más les pregunto y le cuento.

Anónimo dijo...

cuenteme de ella lo que le gusto a el de ella

antiprímula dijo...

anónimo: entonces le cuento de él, lo que le gustó a él, no lo que era ella, porque me parece que no la vió entera.
Dice que le gustó que fuera fanática del dulce de membrillo, que leyera poesía, que "pareciera" saber qué quería, que usara zapatillas rojas, que mencionara el anarquismo y que usara una remera de camisón que dice "gracias Diego".
Y nada más.

Ayoween dijo...

Qué loco, no? A ella le gustaron tantas cosas de él, tan específicas y ocultas para la mirada superficial...
él se quedó con la cáscara?

antiprímula dijo...

Ay, Ayoween! Tu nombre me hizo saltar el corazón. (¡Qué bárbaro! Es de no creer... todavía me hace saltar el corazón lo que lo roza.)
Y sí, muy a mi pesar, creo que se quedó con la cáscara. No se tomó tiempo de verme, ni me dió tiempo a mostrarme.
Así las cosas, así la vida... Seguir.
¡Gracias por tu visita!