lunes, 10 de septiembre de 2007

Vincent. Pensar la pintura para pensar la actuación.

Mi gran deseo es aprender a hacer deformaciones o inexactitudes o mutaciones de lo verdadero; mi deseo es que salgan, si es necesario, hasta mentiras, pero mentiras que sean más verdaderas que la verdad literal. Vincent Van Gogh

5 comentarios:

Anónimo dijo...

"El hecho de que los maestros sigan trabajando día tras día es una afrenta para los poderes de este mundo, que alientan la ignorancia de las mayorías porque saben que es condición de su supervivencia: nos necesitan torpes, aletargados, dóciles.
Creo, de todos, modos, que la principal causa por la que hoy se combate a los maestros con sueldos magros y tareas quiméricas es otra, más miserable y por eso inconfesa. Un maestro es alguien que decidió pasarse la vida encendiendo en otros la chispa que encendieron en él cuando niño; devolver el bien recibido, multiplicándolo. Para los poderosos de este mundo, que de niños lo recibieron todo y ahora lo arrebatan todo, la lógica de esa decisión es obscena, es un espejo en el que no quieren mirarse y por eso lo rompen, huyendo del escándalo”
Marcelo Figueras, Kamchatka, (2002)
Feliz día.
Marcelo.

antiprímula dijo...

Gracias Marcelo por tu hermoso correo.
Mirti.

Apuntes+Editorial dijo...

Hola.
Andaba paseando por su blog, y me gustó ésto. Y me interesó, no sé, eso es todo. (Hoy estamos austeros)



Un beso

Apuntes+Editorial dijo...

Bueno. Creo que podría haberte tuteado en vez de decir "su blog". Pero me salió así... será porque estoy medio austero. (¿?)

antiprímula dijo...

Hola apuntes, la austeridad puede ser una virtud según el caso. Sólo cuidemos que no sea solemnidad, así que tuteame ¡ché!
Había olvidado este post, tu comentario me volvió a él.
Beso.