"... Yo creía hasta ahora que todas las cosas del universo eran, inevitablemente, padres o hijos. Pero he aquí que mi dolor de hoy no es padre ni es hijo. Le falta espalda para anochecer, tanto como le sobra pecho para amanecer y si lo pusiesen en la estancia oscura, no daría luz y si lo pusiesen en una estancia luminosa, no echaría sombra. Hoy sufro suceda lo que suceda. Hoy sufro solamente."
de "Los heraldos negros", de Vallejo, en uno de esos días en que uno no debería haber salido de su agujero.
3 comentarios:
De mis poetas favoritos, su foto duerme a mi derecha todas las noches.
"¡Ay amiga! qué variable es el destino"
¡Infinitamente variable!
¿Y a la izquierda? ¿Quién?
a la izquierda descansa mi mesita de luz, con sus libros encima, su despertador, y papeles amarillos que sirven para marcar páginas de interés.
et tu sais,
la presence d'un autre...
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